● Dañar tu reputación
● Ciberacosar a otras personas
● Enviar correos fraudulentos: phishing, programa malicioso, estafas, entre otros.
● Poner en circulación información falsa y publicidad no deseada.
Consejos para proteger tu email
El correo electrónico es una fantástica herramienta que te ofrece muchas posibilidades, tanto en el trabajo como en la casa, pero tienes que ser precavido cuando lo uses. Por tanto, cúrate en salud y aplica las siguientes recomendaciones.
● Activa la verificación de dos pasos para añadir una capa extra de seguridad en el proceso de autenticación.
● Evita facilitar información que pueda comprometer tu privacidad. En caso de que no tengas otra opción, cifra o comprime los archivos con una contraseña que solo conozcan el destinatario del correo y tú.
● No abras correos de usuarios desconocidos y elimínalos: pueden contener archivos con programas maliciosos o que suplantan la identidad de alguna entidad.
● Aunque el remitente del correo sea conocido, si el mensaje te resulta sospechoso, consulta directamente a la persona para confirmar que no han falseado su dirección de correo.
● No te olvides de realizar una copia de seguridad para que no pierdas información de valor si surge un problema con el servidor de correo.