García Márquez y el sueño de una escuela de cine en Barranquilla

“Siempre me ha gustado el cine, hasta el punto de que lo único que he estudiado sistemáticamente en una escuela es el cine. Nunca estudié literatura en ninguna escuela, ignoro por completo las leyes de la Gramática Castellana, escribo de oído, pero hice mi curso de Dirección de Cine lo mejor que pude en el Centro Experimental de Cinematografía de Roma”.

La frase la dijo Gabriel García Márquez en agosto de 1987 durante una entrevista concedida a El Espectador y fue una de las tantas declaraciones de amor que el escritor colombiano le hizo al cine. Como la literatura y el periodismo, el llamado séptimo arte fue una de sus grandes pasiones. García Márquez la canalizó en diversos oficios. Entre febrero de 1954 y julio de 1955, por ejemplo, escribió para El Espectador numerosas reseñas sobre las películas que se proyectaban en los principales teatros de Bogotá. Las publicó bajo el título de “El cine en Bogotá. Estrenos de la semana” y constituyeron una de las primeras muestras de crítica cinematográfica independiente en Colombia.

En octubre de 1955, luego de que El Espectador lo nombrara corresponsal en el extranjero, se inscribió en el mencionado curso de dirección cinematográfica en el Centro Experimental de Cinematografía de Roma, atraído entonces por el neorrealismo italiano, especialmente por las obras de Vittorio De Sica y Cesare Zavattini. Aunque nunca lo terminó, aquello fue una experiencia decisiva para la comprensión de la industria del cine y los diversos oficios que desempeñan cada una de las personas que intervienen en la producción de una película. Casi una década después, cuando se instaló con su familia en Ciudad de México, escribió guiones para largometrajes y siguió haciéndolo durante gran parte de su vida, alternando ese oficio con el de periodista y escritor de libros de ficción.

En septiembre de 1960, el Centro Artístico de Barranquilla, orientado por su gran amigo Álvaro Cepeda Samudio, invitó a García Márquez como delegado del Cine Club de Colombia a conversar sobre los estatutos de la futura Federación Colombiana de Cineclubes. Fue en ese momento cuando Gabo contempló con Cepeda Samudio la fundación de una escuela de cine en Barranquilla. Como consecuencia de esta idea, García Márquez elaboró un anteproyecto para la creación de lo que entonces llamó “Instituto del Cine en Barranquilla”. El documento, que reposa en el archivo de la Tita Cepeda, incluía un análisis presupuestal para los gastos de sostenimiento y la nómina, una selección de lugares donde funcionaría el instituto en su primer año de labores, un programa de estudios para el primer curso y un presupuesto anual para materiales fotográficos.

A pesar de las gestiones de Gabo y Cepeda Samudio, el proyecto jamás se concretó. Sin embargo, aquel sueño sentó las bases de la Fundación para el Nuevo Cine Latinoamericano, creada en Cuba por García Márquez en diciembre de 1985 junto al Comité de Cineastas de América Latina. Al año siguiente, también en diciembre, Gabo impulsó la creación de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños, un lugar en donde impartiría varios cursos de escritura de guiones cinematográficos.

En la exposición Todo se sabe: el cuento de la creación de Gabriel García Márquez, que organiza la Fundación Gabo junto con la Biblioteca Nacional de Colombia y el Harry Ransom Center, se encuentran los manuscritos originales de guiones y argumentos para cine escritos por Gabo, así como parte de su correspondencia con otros cineastas. Otra prueba más de que el cine siempre ocupó un lugar especial en las obsesiones narrativas del nobel colombiano.

Sobre la exposición “Todo se sabe, el cuento de la creación de Gabo”

Todo se sabe, el cuento de la creación de Gabo es la mayor, más amplia, completa y reveladora exposición desarrollada hasta el momento sobre Gabriel García Márquez, colombiano universal, uno de los pensadores más brillantes de América Latina y autor reconocido y leído en el mundo entero.

La muestra, de impacto nacional e internacional llega por primera vez a Colombia y tendrá lugar en la Biblioteca Nacional de Colombia en Bogotá, a partir del 23 de abril de 2025, como antesala de la conmemoración del centenario del nacimiento de Gabo en 2027. Será una oportunidad única para redescubrir su legado y valorar su impacto en la literatura y el pensamiento global.

A partir de los archivos personales custodiados por el Harry Ransom Center, que dialogan con archivos provenientes de otras colecciones nacionales e internacionales, esta exposición ofrece una mirada inédita a la trayectoria y proceso creativo de Gabriel García Márquez, desde sus primeros años en Aracataca hasta su consagración como autor global.