Entrevista televisiva a Gabriel García Márquez después de enterarse que había ganado el Premio Nobel de Literatura.
En la madrugada del jueves 21 de octubre de 1982, el viceministro de Asuntos Exteriores de Suecia, Pierre Schori, llamó a la residencia de Gabriel García Márquez en Ciudad de México para comunicarle al escritor que había ganado el Premio Nobel de Literatura. Fue una llamada que el novelista no esperaba, aunque sabía que era uno de los ‘eternos’ candidatos al galardón otorgado por la Academia Sueca.
Poco después llegaron los periodistas y, durante varios días, invadieron su casa en la Calle del Fuego para registrar sus primeras impresiones luego de recibir la noticia. El periodista mexicano Abraham Zabludovsky fue uno de los que pudo entrevistarlo para la televisión. Lo hizo para el noticiario 24 horas de Televisa.
En aquella entrevista, García Márquez habló de su sorpresa al saber que había sido reconocido con el Nobel. “No era posible pensar que me lo dieran a mí”, dijo. “La Academia evidentemente estaba tratando siempre de revelar valores desconocidos, daba la impresión de que buscaban autores que consideraban que merecían el Premio Nobel pero que por algún motivo extraliterario no habían tenido la oportunidad de ser conocidos. A ellos les estaban dando el Premio Nobel y en todos los casos fue una decisión justa”.
El escritor colombiano también se refirió a la continuidad de su escritura y objetó la idea de que la Academia Sueca sólo premiaba a los autores que habían concluido su obra. “El Premio Nobel es el premio a una obra en el momento en que se concede. Eso no quiere decir que se termine ahí la obra. No es un reconocimiento a un libro sino a una serie de libros. Nada obliga a que la obra se termine. Al contrario: creo que el premio es una razón para seguir escribiendo, pues ahora hay la gran ventaja de que nunca más seremos candidatos al Premio Nobel, cosa que da mucha tranquilidad todos los meses de octubre”.
Ante la pregunta de si asistiría a la ceremonia de recepción del premio en Estocolmo, García Márquez comentó que lo haría vestido de guayabera. “El traje obligatorio es el frac, pero en la Academia Sueca aceptan que los hindúes vayan con su traje nacional. Yo estoy dispuesto a demostrar que la guayabera es el traje nacional del Caribe y que tengo el derecho de ir vestido así. Con tal de no ponerme frac, soy capaz de aguantar el frío”.
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